Libros que nos inspiran

Uno de los ejemplos más ingeniosos de una suerte de zoosemiótica la protagonizan dos perros que se encuentran en Moscú: uno está flaco y el otro, bien alimentado.

Valdenoceda no fue cainita

Con el libro se quiere rehabilitar la memoria de los republicanos y la verdad de lo que sucedió en aquel infierno: tortura y muerte que el franquismo sembró sobre las personas que defendieron la legalidad, la democracia, la República.

Valdenoceda, el penal de los olvidados

La mirada de Gregorio recorre el camino que separa el río Ebro de la entrada del penal. Sus ojos se llenan de lágrimas cuando imagina como en un espacio «tan pequeño» pudieron convivir miles de presos sin apenas alimento, mantas o un espacio en el que guarecerse de...