La Tierra Santa es el manicomio, el lugar de los marginados, de esos seres distintos a los que la sociedad no quiere ver, pero también es un trasunto de su propio cuerpo, del que en la vejez hizo bandera –son célebres sus fotos leyendo desnuda– como una reivindicación...
La escritura pausada y profunda de la autora, así como el dibujo de personajes perfectamente reconocibles, hace que cada uno de estos relatos nos transmita una emotiva empatía. Nos permite reconocernos como lectores y como partes integrantes de un mecanismo social en...
Estos son relatos bien medidos, que llaman a las cosas por su nombre y nos acercan a existencias concretas. Al valor literario se suma el sociológico: la descripción atinada de un tiempo extraño y bastante inhumano.
Casi nadie lee el libro exacto que tú escribiste, pero si está bien leído te vienen las ganas de hacer otro inmediatamente y si lo volvéis a leer, cosa que yo hago, decís ‘es el libro que quise escribir’.
Es probable que este sea su libro más brillante, sus historias se desarrollan en ambientes urbanos y contemporáneos donde la soledad y los encuentros fugaces siempre dejan huella.