Martínez cierra su estudio con un par de preguntas todavía por resolver y que buscan respuesta en la diferencia de lo que significa, para un latinoamericano, ser o cómo debe ser. Martínez logra así trazar un interesante capítulo en que el lector de Darío es capaz de entender el acercamiento del escritor e intelectual al problema constante de la identidad latinoamericana.