Sin llegar a ser una obra perfecta —quizá la narración desfallezca algo a la mitad— El diario de hombre que era dos hombres es una historia que no tiene nada que envidiar a otras novelas de este tipo que vienen firmadas por autores ya consagrados; al contrario, diría que su escritura pulcra y cuidada es literariamente superior a la mayoría de las que colman la sección de fantástico de las librerías (y no digamos cuando se trata de novelas angloamericanas, tan prolijas como descuidadamente traducidas).