Este hombre sereno a veces mira su propia obra con cierto desapego, como si fuera algo prescindible que jamás dejará huella; craso error, no hay publicación de Manuel Moyano que nos deje indiferentes.
Este hombre sereno a veces mira su propia obra con cierto desapego, como si fuera algo prescindible que jamás dejará huella; craso error, no hay publicación de Manuel Moyano que nos deje indiferentes.